. ¿A QUE TE PODES ACOSTUMBRAR?

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miércoles, 19 de junio de 2019

Estaba
justo justo
(Cómo para variar, vio?)
Haciéndome un montón de interrogantes sobre todo lo que todavía no se y quiero construir, de lo que hago, lo que me gusta etcetcetc, eso, hay un montón de materiales. Hoy llovió un poco y no sé si se pusieron feos, hay que ver si en estos días sale un poco el sol para secarlos, si sigue nublado ojalá no tomen olor a humedad porque después cuesta sacarlo un poco, hay que tirarle olor rico o incluso, a veces, tirarlos, y comprar otros... Pero empezar de nuevo con otros y gastar esfuerzo para que por ahí vuelva a llover es alta paja; entonces están húmedos y con feo olor y yo los cuido porque a veces no se si se consiguen fácil, y a veces me acostumbro y la posta es que si están acá es porque me gustan todavía, y también sé que igual sale el sol de vez en cuando y les crecen algunas flores y yo me olvido de la construcción y me quedo tomando sol porque me gusta que me dé el sol en la cara un rato y olvidarme de todo el rollo de la construcción, en lo que hago de mi, quiero ser, esto lo otro blabla, y ahora estoy metida abajo de estas luces fluorescentes re feas, entre un montón de pequeñas paredes azules y rodeada de jóvenes que relegan sus sueños un rato, y me acuerdo de que hoy me comí una pera abajo del sol y me pongo un poco triste.

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